Cuándo, dónde y cómo morir.

Sin respetar el orden voy a empezar por el medio. Sólo porque es fácil y de lo único que estoy segura.
Dónde...en la casa de un amigo. Si es posible que la casa de ese amigo esté llena de otros amigos, pero no muchos, más de tres suelen molestar. Ahí, y metiendo ya el cómo, la muerte debe ser lenta y progresiva, pero sobretodo lenta. Porque si es lenta, cuando haya acabado, uno puede estar seguro de haber vaciado cada rincón de vida sin apuro. Para evitar cualquier tipo de resurrección! Es lo último que queremos...aunque el corazón opine lo contrario. Y acá me atrevo a decir que hablo desde la experiencia, y si hay algo doloroso en todo ésto de morir, es resucitar. El corazón a veces se equivoca.
Acá el o los amigos juegan un papel clave, es por ésto que el amigo o los amigos, deben ser de verdad. Es de gran ayuda también que hayan ya vivido su propia muerte sin resurrección, o al menos estar convencidos de tal cosa.
Ahora, mis queridos, el "cuándo" es un gran problema, uno grande y confuso. Porque el tiempo a la hora de morir es otro, muy diferente al que estamos acostumbrados a vivir cuando vivimos, entonces todo se mal interpreta porque no se conoce.
Entonces...¿Cuándo morir? Me atrevo a decir que lo antes posible, ya, ahora, antes que me llames, antes de ir a dormir, en menos de lo que canta un gallo, antes de volverte a ver, mucho antes.

Pero claro, qué sabré yo del cuándo, si no hago más que resucitar.

juego de cinceles

yo sé de bombas en el pecho
de soledades en el corazón
sé que se te escapa todo lo que yo pretendo liberar.

sé que estuve mal por dejarte hacerme llorar
por prestarte algo que no querías
ni me ibas a regresar.

sé de balas al orgullo
de muerte, de amor, de resusitar
sé que no sabés lo mucho que ignorás.

tengo la angustia atada a la bufanda
y un pasaje en el ojo haciéndome llorar.



hora de verano del pacífico.

Recién pensaba en qué estarás pensando, siempre pienso en eso.
Pensaba en todas las bocas que besé y que quedaron inconclusas,
pensaba si también cada tanto me pensarán.
Pensaba en la boca que besé y que besé y que besé hasta que no la besé más.
Pienso que no sé nada de nada, de verdad, que sólo tengo un super poder, y que siempre hablo de amor.
Pienso en que es una de esas noches en las que desespero por saber más. Y no sé.
Pienso en la boca que beso y no me canso de besar.
Pienso que tu novio es un pelotudo, porque no lo conozco y eso me permite pensar eso. Pero seguro es un pelotudo. Como podemos ser todos, pero él seguro es un pelotudo.
También pienso en que capaz ni tenés novio.
Pienso en qué será de tu vida, de verdad, no creo que alguna vez lo sepa, pero pienso en eso.
Y vuelvo a pensar en las bocas que besé, y que fue tan lindo besar.
Besar cuando te besan.
Volver a pensar en las bocas que besé, en tu boca, en la boca que beso, en la que me gustaría besar, y en qué estarás pensando.




con las cuerdas al aire

la espera moderna ya no es del otro lado de la ventana
ahora es del otro lado del lado que no me mostrás.

entre tu boca y lo que me querés decir,
existe un abismo de dudas,
y cabe la posibilidad.




In Limbo.

ahora, yo estoy acá, mirando fijamente la salida de esa canaleta que no sé ni dónde tendrá comienzo,
ni sé si es una oficina eso que está ahí en frente, o una casa con una familia enorme.
ahora, que yo estoy acá mirando por la ventana, fijando la mirada en detalles olvidados de un paisaje de lo más común,
¿vos dónde estás?
ahora.
que en realidad fue hace unos segundos atrás.
ahora!
¿vos dónde estás?
y me caigo en el más profundo de los pozos de pensamiento
más profundo que el largo de la canaleta esa que ni sé dónde empieza,
más profundo que la tristeza que seguro cargas pero no le contás a nadie
ahora, ahora mismo, ¿vos dónde estás?
ahora!


mi buzo huele a humo de anoche,
y no me siento ni mal ni bien
pero estoy provocando el choque con la mente
porque tengo una mente sabés? que tiene poderes
y voy a hacer que nos encontremos
y ese día voy a oler a perfume.